Excelencia de comida. Fui con mucha expectativa debido a que tiene un nombre bastante reconocido. Y así fue, no me desilusiono. Al comienzo crei que no iba a pasarla muy bien, debido a que el lugar es muy chico y al no tener reserva tuvimos que esperar bastante hasta que nos den una mesa. Asi que si llegan a ir, ya saben, vayan con reserva. Fuimos 3, pedimos un asado, un bife, provoleta y papas fritas. Por primera vez, luego de bastantes parrillas visitas, me preguntaron cómo quería la carne. Bien cocida conteste. La espera fue infinita y bastante irritable, pero entendible por la cantidad de gente que había. Hablemos de la carne: el asado era súper tierno, y el vacío era de sos que no necesitas chuchillo para córtalo. Un mangar por donde lo veas. Las papas fritas y la provoleta estaban bien también, pero se quedaron con el 2do lugar. La comida como dije antes, excelencia. Pero el trato... dejo mucho que desear. Los mozos tenían poca paci...